Influencia de la presión mediática en la salud mental y/o en los trastornos mentales de personajes famosos.
Hoy en día, son muchos los medios de comunicación que se hacen eco de los problemas de salud mental en personajes de actualidad. Algunos aparecen a raíz de la presión mediática que sufren estas personas famosas ya sea por sus roles de influencers en redes sociales (RRSS), deportistas de élite o profesionales del cine y la música.
Las noticias que leemos respecto a esto, la mayoría de las veces no relatan con exactitud el nivel de afectación que tienen estas personas, enmascarando de alguna manera el problema mental real que sufren, contribuyendo así al tabú que todavía existe en torno a estas enfermedades, y agravando de esta manera la situación de estos personajes.
A continuación, analizaremos de qué manera afecta la presión mediática en distintos ámbitos, así como daremos a conocer algunos casos reales de personajes famosos con trastornos o enfermedades mentales.
DEPORTE
Estamos viviendo un momento de satisfacción con la integración del deporte como ocio y salud entre la mayor parte de la sociedad. Todos sabemos de los beneficios físicos de practicar deporte de forma regular, pero se habla menos de cómo ésta práctica nos influye psicológicamente. Tras tomar la decisión de comenzar una actividad deportiva, otras muchas decisiones la acompañan. Por ejemplo, mantener una constancia, buscar motivaciones como ponerse retos y comprometerse a cumplirlos. Según vamos avanzando, nos damos cuenta que no se trata solo de salir a correr un día, sino de un trabajo y fuerza mental que consiga adherencia y bienestar tanto físico como mental (1). Pero existe otra cara del deporte, el de alta competición, aquel que conlleva muchas horas de entrenamiento, múltiples compromisos deportivos y escasa vida personal.
Para estas personas el agotamiento físico se acompaña de agotamiento emocional. A estas dos variables se les puede unir la presión económica por los sponsors, carecer de apoyo familiar y la presión social, tanto de los medios de comunicación como por las RRSS (2).
Nos viene a la cabeza, el reciente caso de Simone Biles, durante los pasados Juegos Olímpicos. La cuatro veces medallista olímpica de gimnasia femenina pertenecía al equipo de EEUU. Como nos podemos imaginar, prepararse para esa competición requiere de un desgaste físico y emocional importante. Pues bien, el pasado mes de julio tras lograr la peor marca de su historia olímpica, una prueba de salto, decidió parar y retirarse. La deportista argumentó que en ese momento su salud mental era su prioridad y que no se sentía capaz de tener que hacer lo que otros esperaban de ella. Añadió que ya no confiaba tanto en sí misma, que quizás fuera por su edad (tiene 24 años). También relató que sentía la presión de tantas personas que le respondían a través de las RRSS y que no podía más (3).
RRSS
Cada plataforma de comunicación nos ofrece su estilo, modelos de intercambio dinámico de mensajes entre personas, grupos o incluso instituciones. El fácil acceso mediante internet y los dispositivos móviles, nos facilita la comunicación e interacción. Aunque estos servicios los definimos normalmente como algo ventajoso, puede tener una repercusión negativa para nuestra salud mental por el alto grado de dependencia que provocan. Existen estudios que constatan la relación entre la población adolescente con alta dependencia a la redes sociales y los niveles altos de depresión o comportamientos agresivos (4).
El factor agresivo lesivo, es desgraciadamente muy reincidente sobre personajes públicos, siendo este el caso de muchos influencers, que no son más que personas con capacidad de influir en las opiniones de otras personas normalmente más jóvenes y que en muchas ocasiones se ven obligadas a no permitir comentarios en algunas publicaciones por miedo al desagradable feedback. A pesar de esto, son más ofensivos los mensajes que reciben por privado y aunque existen filtros para ocultar mensajes de contenido desagradable, son muchos los que por curiosidad terminan leyendo esas opiniones (5).
El caso de la influencer Aida Domenech (Dulceida), es un ejemplo de prevención de males mayores cuando en 2018 abandonó Twitter, describiendo a la red del pájaro azul, como “una red social de odio profundo, en donde se permite insultar sin revelar su identidad”. La influencer recibía mensajes lesivos sobre su cuerpo y su orientación sexual (5).
ARTE
Las personas que se dedican profesionalmente al arte, en cualquiera de sus especialidades, siempre han estado, como se suele decir “en el punto de mira”. Cualquiera de las disciplinas artísticas, suponen un gran nivel de exigencia, donde los artistas están sometidos a un gran desgaste, tanto físico como mental y emocional; tras mucho trabajo para su preparación, llega el momento de mostrarlo al público. Al mostrar un arte, el público disfruta de éste, pero también tiene la libertad de opinar sobre aquellos que lo llevan a cabo. Dicha opinión puede ser positiva o negativa, pero al final es una opinión más, la cual los artistas están más o menos preparados para aceptar. El problema llega cuando estas opiniones dejan de serlo, para convertirse en comentarios ofensivos, titulares engañosos e hirientes, ataques verbales e incluso acoso a los artistas, los cuales los sufren, afectando a su salud mental en mayor o menor medida (6).
Esto se ha agravado mucho en los últimos años con el nacimiento y rápido desarrollo de los medios de comunicación y las redes sociales. Debido a su trabajo, estos artistas hacen un uso profesional de su imagen y cuentas en estas plataformas, con el fin de llegar a su público y difundir su arte, pero en ellas muchos de los usuarios se esconden tras perfiles anónimos con el único propósito de atacar y ofender, criticando su persona, aspecto físico, e incluso su trabajo. No debemos olvidar que estas personas, aparte de su trabajo tienen una vida personal, en la cual existen problemas de salud, familiares, etc., como en la de cualquier otra persona.
El hecho de estar expuestos 24 horas al día, todos los días del año a una gran presión mediática y social, a comentarios desagradables de desconocidos, prejuicios e incluso, intromisión en su privacidad, hacen que se desarrollen en muchos artistas trastornos mentales muy variados, que algunos que ya tenían de base empeoren, y en casos fatales, que lleguen al suicidio.
A pesar de esta situación, muchas personalidades se arman de valor y se deciden a contar su situación abiertamente, con la finalidad de acabar con el gran estigma que existe en torno a las enfermedades y trastornos mentales, y así poder ayudar a muchas más personas que se encuentren en su misma situación (7).
Un caso muy reciente es el de Verónica Forqué. La actriz española había participado recientemente en el programa de televisión “Masterchef Celebrity”. A raíz de su aparición en el programa, recibió numerosos ataques y comentarios ofensivos y desagradables en redes, a causa de las evidentes manifestaciones de su depresión, así como la propia realización del programa, que ha sido fuertemente criticada por aprovecharse de alguna manera de ello para dar más publicidad al reality y captar audiencia. Toda esta situación, sumada a su patología mental de base y su delicada situación personal hicieron que, trágicamente, la actriz acabara con su vida el pasado 13 de diciembre (8).
Otro caso muy conocido e impactante en el mundo de la música fue el de Pastora Soler. La cantante sevillana anunciaba en el año 2014 que dejaba temporalmente la música ya que padecía un trastorno de miedo y ansiedad escénica que le impedía por completo llevar a cabo su trabajo, ya que este trastorno psicológico estaba provocándole incluso signos y síntomas físicos como desmayos o laringitis. Por suerte, y con ayuda de profesionales del Centro de Prevención en Artes Escénicas, la cantante consiguió superar el brote, controlar esta enfermedad y seguir con su carrera musical (9).
CONCLUSIÓN
La enfermería es una profesión imprescindible, en muchas ramas conocidas y no tan reconocidas, como es la de salud mental. La enfermera de salud mental es aquella persona que va a acompañar y a cuidar al paciente desde el diagnóstico del trastorno, y durante todo el proceso. Para ello, una de sus labores principales es dar apoyo y ayuda ante situaciones de estrés, o en experiencias que el paciente no sepa cómo gestionar. Un factor latente hoy en día, que repercute a gran escala en el bienestar mental de la sociedad, y que afecta la mayor parte de la población de forma intrínseca, son los medios de comunicación. Con esta idea queremos plasmar la "cara B" de la vida de personajes famosos o personas célebres que a diario tienen que soportar la presión mediática, a la vez que se ven forzados a mostrar una faceta (cara A) ideal o utópica. Podemos observar como en el caso de dichos personajes, los trastornos mentales se ven agravados o incluso desencadenados por la intensa presión mediática que sufren, independientemente del medio de comunicación.
Para finalizar, la labor de la enfermera debe centrarse en normalizar y visualizar los problemas mentales al igual que con los físicos. Se debe crear una red de seguridad en la que se sientan lo suficientemente cómodos como para buscar ayuda desde el inicio del trastorno, no solamente cuando se encuentran en un momento de crisis que les obliga a parar o postergar un proyecto. Debido a que son modelos a seguir, la visibilidad de estos trastornos a través de estos personajes nos sirve como medio para llegar a más población. Tu equilibrio depende de tu salud mental, cuídala.
Laura Biedma Morilla
Silvia Fernández Redondo
Victoria Isabel García Crespillo
Sara García Martín
Sara González Alba
Laura González Fernández
Para comenzar hemos de felicitar a las responsables de este artículo por realizar una conclusión desde el punto de vista de nuestra profesión enfermera tan eficaz y concreta, recalcando nuestra labor como profesionales de la salud a la hora de prevenir y cuidar.
ResponderEliminarComo bien describe el texto hoy en día las redes sociales se encuentran prácticamente en todas las profesiones, sobre todo en aquellas con un gran público. Toda persona que se vea expuesta ante una red social puede recibir comentarios positivos que le hagan reforzar su autoestima y aumentar la apreciación por su trabajo, pero a la vez pueden existir comentarios negativos que pretenden herir a la persona más que beneficiarla con una opinión constructiva.
Algunas personas no son capaces de soportar la presión que esto conlleva, algo completamente normal ya que mediante el anonimato las personas pueden llegar a hacer mucho daño con palabras. Por ello creo que deberíamos hacer hincapié en la base de toda esta situación, la educación, si desde la infancia a los niños y niñas se les refuerza con la prevención ante diversos problemas en la salud mental que pueden existir a lo largo de la vida y se les prepara emocionalmente puede que se generen algunos métodos barrera ante los comentarios tan horribles que pueden recibir de otras personas cara a cara o virtualmente.
Además mediante la educación se intentaría evitar que futuros niños sean los causantes de este abuso mediante una red social, haciéndoles entender las consecuencias del daño que se puede realizar. Principalmente porque creemos que muchas personas que hacen una mala acción de las redes sociales a este nivel no son conscientes de las repercusiones que tienen sus comentarios a nivel personal de la persona herida.
Espero que con este artículo las personas sean capaces de reflexionar al igual que hemos hecho nosotras, nunca se sabe por lo que está pasando una persona en su interior ni física ni mentalmente.
Grupo B.1.1
En primer lugar, agradecer este post por visibilizar la parte "negativa" de lo que implica ser un personaje público, y así hacer ver lo importante que es tener en cuenta que estos "personajes" públicos son personas.
ResponderEliminarCon respecto a las redes sociales, estamos tan acostumbrados a que se exponga la vida de las personas públicas, que nos sentimos con el derecho de juzgar, comentar y exigir saber y conocer determinados aspectos de la vida PRIVADA de dicha persona, sin tener en cuenta que cada uno es libre de mostrar lo que quiera en sus redes sociales. Este tipo de actitudes generan comentarios inadecuados y para nada necesarios en el perfil de aquella persona que se expone.
Es indignante ver cómo la gente justifica sus actos mencionando la exposición del famoso, sin tener en cuenta que detrás de la pantalla hay una persona, que tiene una vida privada, y ha decidido exponer ciertos aspectos de su vida, pero eso no nos da el derecho a invadir su intimidad.
Con respecto al deporte y otro tipo de profesiones que implican una exposición pública, y por tanto, comentarios de los medios de comunicación, considero que es muy necesario que visibilicemos los trastornos mentales, porque si son muy frecuentes en personas no públicas, en aquellas que tienen una exposición mayor o un nivel de exigencia muy alto puede llegar a ser mucho más frecuente si además el resto de los seres humanos nos comportamos con poca empatía con ellos y tratamos de ocultar dichos trastornos en lugar de apoyarlos y ayudarles a que se lleven de una forma más amena.
RAQUEL QUIÑONES BEGINES, GRUPO A.2.2.B
En primer lugar, queremos agradecer a nuestras compañeras haber escrito acerca de este tema para que tengamos más conocimiento sobre él.
ResponderEliminarMuchas veces se nos olvida que detrás de esas figuras a las que admiramos (deportistas, actrices, cantantes..) se encuentran personas normales que también lidian con problemas de la vida cotidiana, sumados a otros que se derivan de su profesión (como la enorme presión a la que están sometidos, o las altas expectativas que el mundo entero tiene sobre ellos, como en el caso de Simone Biles). Hacer deporte contribuye a una mejora de la capacidad física y mental, aunque todo en exceso llega a ser negativo. Los deportistas de élite llevan su cuerpo y su mente al extremo y cuando alguno de los dos elementos deja de funcionar, todo cae en picado.
De alguna forma, la sociedad ha aceptado que por ser estas personas públicas, no tienen derecho a tener intimidad, ni vida privada. Esto es algo que se refleja bien cuando los nuevos influencers deciden no compartir según que ámbito de su vida, y sus seguidores les argumentan que deben compartirlo porque “es su trabajo”. Las redes sociales constituyen una herramienta con muchas luces y sombras, porque si bien es cierto que nos permiten comunicarnos de manera muy sencilla, también es muy fácil esconderse tras un nickname falso para insultar y faltar al respeto. En nuestra opinión, los usuarios sí que tienen derecho a hacer críticas constructivas a estos personajes. El problema surge cuando se escriben comentarios con faltas de respeto, solo con intención de mofa y daño, en vez de críticas constructivas que ayuden a mejorar en su trabajo a éstas personas. Estos comentarios a veces llegan a convertirse en amenazas de muerte.
Por último, estamos completamente de acuerdo con la conclusión de nuestras compañeras. Como enfermeras debemos fomentar el cuidado de la salud mental, y favorecer que todo el mundo, incluidos también los celebrities, sean tratados ante cualquier tipo de problema mental o físico.
Marta Maldonado Domínguez y Elvira Lara Sánchez. B2.1
Para comenzar me encantaría recalcar el papel que tiene la enfermería en este tipo de casos en la que la salud mental, no es tan fácil de gestionarla y que pueden acabar pasando factura y evitar que la persona afectada pueda desempeñar su actividad, ya sea laboral, de ocio, deportiva...
ResponderEliminarLa presión mediática hoy en día, la mayor parte se recibe por las redes sociales. Esto ocurre debido a que una persona famosa normalmente tiene un numero elevado de seguidores, entre los cuales se encuentran personas que no son afines a este personaje público. Esto los lleva a comentar o enviar mensajes despectivos y/o desagradables con la finalidad de dañar la imagen y la autoestima de la persona que esta al otro lado de la pantalla (en este caso es un personaje público). Este problema se puede volver aun mas grave hasta el punto de que hay personas que se crean perfiles falsos, para desde el anonimato realizar amenazas y acusaciones más graves.
A todo este se le suma la disminución de la intimidad y de la vida privada, lo que en muchos casos afecta a la salud mental de la persona. Por ello es importante estar bien asesorado y tener una buena educación sobre la salud mental para que, en situaciones comprometidas a causa de la presión mediática, sepas gestionarla de la manera adecuada.
Grupo A3.2
En primer lugar, dar las gracias por intentar exponer ciertos problemas que hoy día la gente no tiene muy en cuenta como es el caso de las redes sociales y de la exposición de los “influencer” y la libertad que tiene la gente de opinar sobre la vida de alguien sin tener en cuenta la repercusión que eso puede llegar a tener.
ResponderEliminarNos creemos que por escribirlo detrás de la pantalla, eso no le va a afectar o no va a tener la misma importancia, cuando pasa justo lo contrario.
En el programa “El Hormiguero”, hubo un episodio que sacaron a gente comentando sobre la vida de personajes público en el cual los criticaban y opinaban libremente de sus vidas, más tarde a esos mismos les pusieron delante a ese personaje para ver si eran capaces de decir las mismas cosas. Una vez que los tenían delante no fueron capaces de decir nada, incluso estaban avergonzados de lo que habían dicho y muchos de ellos les pidieron fotos con ellos.
Con esto quiere decir que no somos conscientes del daño que podemos estar provocando cuando los primeros que critican a personajes públicos son personas que siguen su vida y “admiran” a esa persona.
Deberíamos tener en cuenta muchas cosas antes de actuar y ponernos a hablar libremente sobre algo sin saber la repercusión que puede tener. PENSAR ANTES DE HABLAR.
GRUPOS A1.1
Hoy en día visibilizar la salud mental y hablar libremente de ello en los medios es una cosa que todavía no se ve normalizada.
ResponderEliminarComo se describen en el artículo casos de personas públicas que dan a la vista su situación mental muchas veces provocada por la presión social y comentarios ofensivos que reciben día a día. El hecho de hablar y priorizar su salud mental no es bien vista por el público y se llevan mucha crítica por ello. Como, por ejemplo, el caso de Simone Biles, que tras su retirada de competición en los juegos olímpicos recibió muchos comentarios negativos que la posicionaban como egoísta y débil por enfocarse en su salud mental.
Se exige que sean fuertes y sigan adelante justificándolo con que son personas públicas y esto forma parte de su trabajo. Este tipo de justificación es completamente erróneo, ya que el hecho de ser una figura pública no significa que tengan que lidiar con la mala educación y faltas de respeto por parte de sus seguidores en las redes sociales. Los comentarios ofensivos que se dejan detrás de la pantalla pueden hacer mucho daño y pueden llevar hasta situaciones tan graves como el suicidio.
Estamos totalmente de acuerdo con que la labor de personal de enfermería engloba la importancia de enseñar a la sociedad que las enfermedades mentales son reales y la salud mental es igual de importante que la salud física.
GRUPO A3.1